En cuanto llegas al recinto, la primera impresión no puede ser más satisfactoria. Una carpa de circo pequeña, de las de antes, perfectamente ambientada como un pabellón sanitario y con una puerta de entrada muy original y tétrica. Los ruidos y risas maniacas que se oyen en el interior mientras haces cola para entrar ya hacen que te entre el miedo en el cuerpo y estes deseando saber que te espera dentro, miedo que se acentúa con la caracterización del personal que te comprueba las entradas.
Una vez dentro, la espera en el bar del circo se sobrelleva de manera genial, tanto por la ambientación, como por los ingeniosos y mordazes comentarios de la megafonía, así como alguna que otra sorpresa para los integrantes de las primeras plazas de la cola. Y en cuanto se abre el paso al público, al escenario en sí, comienza la magia.
La entrada a las butacas del circo no puede tener mejor atmósfera. Un montón de humo y niebla en un recinto rodeado de alambre de espino y óxido, que junto con los gritos y sonidos de motosierras te hacen sentir en un pasaje del terror, hasta el punto que no tienes ganas ni de llegar a la butaca para no cruzarte con los macabros acomodadores. Una vez sentados, casi una hora antes de que la obra en sí comience, el espectáculo ya arranca, con un sinfín de actores haciendo la espera muy corta y dando muchos minutos extra. Ya aquí el terror comienza a dar paso a un humor negro y chabacano, muy de andar por casa. La interactuación que ya comienza a darse entre los internos del Manicomio y los "familiares" que vamos de visita es de las más sublimes que haya visto en un espectáculo, ya que ningún espectador por lejos que esté del escenario se queda sin su ración, ya sea de un doctor maníaco o una niña tétrica.
Tras estos inolvidables minutos de "espera", da comienzo la obra en sí. No vamos a hablar mucho de que ocurre, porque lo divertido radica en que vayas sabiendo poco del contenido, teniendo en cuenta además que cada actuación es cambiante gracias a las geniales improvisaciones de los "enfermos". Cabe decir que la interacción con el público está integrada de una manera genial, desde la bienvenida de un genial Suso Silva hasta la despedida del mismo. En todo momento, el tamaño del circo permite generar un gran sentimiento de grupo entre todo el público y los miembros del reparto que hace ganar muchos enteros a la obra. Todo esto haciendo mención a la parte más "teatral" del show, porque la parte circense tampoco pierde fuelle, con números absolutamente increíbles que os dejarán con la boca abierta. 
Lo mejor: Todo es genial, tanto la ambientación, como la amenización, los números, el humor, el trato... Es un espectáculo redondo.
Lo peor: Los precios del bar.
Puntuación:
Escenografía: 10
Actores: 10
Localización y servicios: 9
NOTA MEDIA: 9,7
Datos:- Lugar: Casa de campo, Escenario Puerta del Ángel (Avenida de Portugal s/n)
- Cómo llegar: Metro Puerta del Ángel (L6)
- Precio: De 15 a 40 €
- Horarios: J 20:30, V y S 19:00, 22:00 y D 17:00 y 22:00
- Duración: 2h y 30min con 15 min de descanso aprox (sin contar la animación previa)
- Fecha: A partir del 25 de Octubre
- Web Oficial: Manicomio de los Horrores
Rubén Betta y Pilar Suzume
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