Solanin

En los últimos tiempos estamos viviendo una explosión en el consumo de manga en el mercado español. La lectura e interés por la cultura y el cómic japonés ha aumentado y se ha normalizado dentro de nuestro país. Esto ha provocado que el espectro de público al que se puede llegar es mucho mayor, y por ello la oferta ha aumentado en consecuencia de una demanda creciente. Es reseñable que muchos de los consumidores han alcanzado una etapa de mayor madurez que les hace reclamar obras que anteriormente era muy difícil que llegasen o, si lo hacían, no contaban con unas ventas suficientes. Eso ha cambiado radicalmente y cada vez es más sencillos que obras maduras y cercanas al costumbrismo sean un éxito nada más llegar a las estanterías. Este es el caso del manga que hoy nos ocupa, Solanin, la obra maestra de Inio Asano, que se ha convertido en unos autores de moda gracias al apoyo de editoriales como Norma o Milky Way que han sido capaces de traernos algunas de sus mejores obras (Solanin, La chica a la orilla del mar, Nijigahara Holograph...). Y es que Asano ha conseguido el estatus de mangaka de referencia en nuestro país en lo que a seinen o josei se refiere, con obras maduras que retratan perfectamente el sentir de una generación a través de la juventud japonesa pero con unos valores claramente universales. Norma Editorial ha sido la encargada de recopilar los dos tomos que conforman Solanin en una edición de tomo único que ha cosechado el éxito que se merece.

Autor
Inio Asano se encarga tanto del dibujo como de la trama de los dos tomos del manga. Nacido en 1980 en Ishioka, Asano es uno de los abanderados de los autores de su generación a lo que a obras maduras se refiere. Desde sus inicios Asano ha destacado por su habilidad a la hora de crear personajes realistas y encajarlos en un contexto adulto repleto de matices, algo que le valió el primer premio de competición GX para mangakas jóvenes en el año 2001. A partir de entonces su éxito y reconocimiento no han hecho más que aumentar, sobre todo a partir de la creación de sus grandes obras: Nijigahara Holograph (2003), Solanin (2005) y La Chica a la Orilla del Mar (Umibe no Onna no Ko, 2009). En el año 2010, el periódico japonés Yomiuri Shimbun describió a Asano como "una de las voces de su generación". Su manera de retratar tanto el espectro social joven en Japón y la manera de comportarse del ser humano son dos de sus señas de identidad, así como su dibujo realista y detallado, lleno de trazos suaves y preciso, tanto en personajes como en escenarios.

Argumento
Solanin es un seinen (o josei) de carácter romántico y costumbrista escrito y dibujado por Inio Asano. Fue

serializado entre los años 2005 y 2006 en la Shogakukan's Weekly Young Sunday. Posteriormente ha sido recopilada en dos tomos. Fue nominada al Premio Eisner en 2009 y cuenta con una adaptación cinematográfica de imagen real. Solanin narra con maestría y sensibilidad los miedos, dudas e incertidumbres de un grupo de jóvenes adultos que lucha por encontrar su lugar en un mundo y en una sociedad que les obliga a madurar y a asumir un rol que ahogará sus sueños. La protagonista, Meiko, y su novio Taneda son dos graduados universitarios que se ven atrapados en trabajos que no les gustan solo por la necesidad de hacer dinero para poder vivir su vida. Sin metas reales y con sueños cada vez más inalcanzables, su adaptación a la sociedad adulta cada vez es más anodina. Solo las puntuales reuniones de Taneda con su antigua banda de música parecen romper esa monotonía, pero sigue sin ser suficiente. Todo esto cambia cuando ambos toman la decisión que cambiará por completo su mundo y hará que se jueguen todo su futuro a una sola carta: Meiko abandona su trabajo de oficinista y Taneda decide dedicarse al 100% a luchar por su sueño de hacer de su banda alcance el estrellato lanzando un disco. A partir de entonces la búsqueda de la utopía se mezcla con los golpes cada vez más duros de la realidad, en un retrato fidedigno del paso de la juventud a la madurez.

Edición
Solanin ha sido publicado por Norma Editorial a finales del pasado 2014. Pese a que la edición original consta de 2 tomos, Norma ha decidido realizar una especie de kanzenban con un único tomo recopilatorio de 426 páginas que contiene todo el contenido original. Nos encontramos con una edición que utiliza un formato rústico con sobrecubierta, de tamaño mayor que los tomos tradicionales al ser una kanzenban recopilatoria (14,8 x 21). Tanto la sobrecubierta como la portada interior son a color, con dibujos originales de Asano, mientras que la edición interior es íntegramente en blanco y negro. Podemos hablar de un papel de gran calidad y una maquetación realmente excelente, fijándonos como siempre en el encuadrado de las viñetas y la utilización de los márgenes que es perfecto y nos permite disfrutar al completo tanto de la historia como del dibujo. Además hay que remarcar la estupenda traducción, que corre a cargo de Marc Bernabé y Verónica Calafell (Daruma Serveis Lingüístics), que cuenta con una total fidelidad al original además de una perfecta localización al castellano. Pese a la gran calidad de la edición y el estilo coleccionista que se le ha dado (aparte de lo bonito que es el tomo en sí, tanto por fuera como por dentro), el precio es bastante asequible: 15,95€, más o menos lo que hubieran costado los 2 tomos de salir por separado, atendiendo a la política de precios actual tanto de Norma como de otras editoriales.

Dibujo
Asano dibuja como escribe: con detalle, con precisión, con suavidad pero con dureza y, sobre todo, con una enorme cantidad de realismo. Lo que más suele atraer del dibujo de Asano es la limpieza de su trazo y el buen uso que hace de las tramas suaves, así como una genial utilización de diferentes escalas de grises a la hora de sombrear. En el caso de Solanin hay que destacar el diseño de personajes y de fondos, quizá uno de sus mejores trabajos en este sentido. Tiene un gran mérito ser capaz de trasladar el realismo y los matices del guión al dibujo, pero Asano no parece tener problema para ello. Es más, una de las señas de identidad de Solanin (y de la mayoría de seinen del autor) es la capacidad de contar la trama simplemente a través de las viñetas o, incluso, a través de detalles de las mismas. En ese sentido podemos decir que Asano utiliza con maestría su dibujo a la hora de aportar ritmo narrativo a su historia, cosa que viene muy bien teniendo en cuenta la carga argumental que suelen tener sus obras. Igualmente destacable es su capacidad a la hora de representar las emociones y la humanidad de sus personajes.

Opinión
Solanin es una obra maestra. No hay discusión en este punto. Si bien otras obras de Asano tienen el mismo potencial pero quedan reservadas a cierto espectro de lectores ya sea por situaciones o por trama, Solanin es una obra que todo el mundo puede disfrutar, comprender y amar. Más allá de todo ello, es una obra generacional, es decir, que si bien todo el mundo puede disfrutarla en su máximo esplendor, leída en ciertos momentos de tu vida puede generar una reacción mucho más fuerte, sobre todo a nivel emocional. En ese sentido es sorprendente el grado de fidelidad y realismo que puede alcanzar su trama y sus personajes, que no solo generan empatía, sino que son reflejos exactos de cualquier joven medio que acabe de salir de la universidad y de sus primeros pasos desnudos en el despiadado y competitivo mundo de la madurez. Además la capacidad para plasmar relaciones amorosas reales, con todo su esplendor y miserias es, simplemente sublime. En el caso de Solanin, Asano coge una historia propia de un shojo o un josei y la eleva a una categoría muy superior gracias a los fenomenales personajes, la introducción de giros argumentales en el momento correcto y a una utilización perfecta y realista de los sentimientos humanos.

Personalmente he de decir que he leído este manga en prácticamente la misma situación que los personajes
que ha creado Asano y por ello el impacto emocional que la obra ha generado en mí es aun mayor. Tengo la sensación que de haber leído Solanin en cualquier otro momento de mi vida, el concepto y la estima que le tengo hubiera sido totalmente distinto. Bien porque se hubiera quedado en una buena obra, interesante pero aburrida por desconocimiento o falta de experiencia (siendo más joven); o bien hubiera desatado una fuerza nostálgica devastadora que podría hacerme amarla más o menos según la fibra que hubiera tocado (siendo más maduro). Se ha dado la casualidad de que la lectura y el momento de mi vida ha coincidido haciendo que la obra, para mí, sea perfecta. Pese a ello, no dejéis de leer la obra, porque si por algo se caracteriza Asano es por ser capaz de conmover, remover la conciencia y no dejar a nadie indiferente. Solanin es una obra madura, alejada de convencionalismos, un cuadro perfecto del sentir de una generación. Pero pese a todo ello no aburre, no se convierte en un lío argumental ni cae en arquetipos o sentimentalismos baratos. No dudéis y leedla en cuanto podáis, porque más que un manga, con Solanin tenéis la posibilidad de leer cómo es la vida.

Puntuación:
Historia: 10
Personajes: 10
Estilo Narrativo: 9
Dibujo: 10
NOTA MEDIA: 9,75

R.Betta