Primeras Impresiones: Tokyo Ghoul (Tomo 2)

¡Muy buenas a todos! Esta va a ser la primera entrada en la que se reseñe el segundo tomo de una obra, así que no sé muy bien si el esquema que vais a leer es el que finalmente se mantendrá cuando reseñemos mangas serializados o al final cambiará algo. Voy a intentar introducir el menor número de spoilers en el "cuerpo" de la reseña y, ya al final, habrá una pequeña opinión del volúmen con los spoilers bien ocultos, por si alguno aun no ha empezado a leerlo pero aun así quiere orientarse un poco. Antes de empezar refrescamos un poco la memoria del tomo 1, donde dejábamos a un Kaneki en el camino de iniciarse como un ghoul, con la dificultad de ese tipo de vida para alguien que aun tiene algo de humano. En este segundo número publicado por Norma Editorial la historia parte de ese punto, con Kaneki trabajando en el Anteiku e interactuando más que nunca con otros ghouls.

En este tomo vemos un poco como se va a ir desarrollando la trama, si bien sigue siendo muy introductorio al respecto de personajes y habilidades de los ghouls. Recordemos que el manga consta de 14 volúmenes y 143 capítulos, así que Sui Ishida se toma su tiempo a la hora de arrancar lo verdaderamente importante. En esta ocasión abarcamos del capítulo 10 al 19, vemos algo menos de acción que en el anterior, donde había un par de peleas de gran importancia: una por ser la causante del estado de Kaneki; y otra por poner en liza al que tiene todas las pintas de ser uno de los grandes antagonistas de la serie, Nishiki Nishio.

No obstante la acción sigue bastante presente en este tomo gracias a la introducción de un par de
personajes que pertenecen al cuerpo de Investigadores de Ghouls (CCG). Los inspectores Amon y Mado son dos personajes que tienen mucho que decir en esta historia, y que también pintan como la parte visible de una organización que se perfila como la gran enemiga de los protagonistas. En este sentido vuelvo a establecer un paralelismo, como ya hice en la primera reseña, con Death Note, existiendo mucho parecido entre esta CCG y la SPK, la organización creada para la captura de Kira. Ambas generan el mismo sentimiento en el lector: si bien tanto la CCG como la SPK son, en teoría, los "buenos" ya que buscan capturar asesinos, la manera en que los autores nos venden a los que deberían ser "malos" hace que se empatice mucho más con esos "antihéroes". En el caso de Tokyo Ghoul esto queda muchísimo más marcado por la enorme brutalidad de la que hacen gala los miembros de la CCG, dando lugar a personajes ciertamente despreciables (especialmente Mado).

Siguiendo con la trama, y sin desvelar demasiado, hay que decir que se consigue un gran equilibrio entre los momentos de acción y las partes más sosegadas, incluso con alguna pincelada de humor. El diálogo, las expresiones y las situaciones están dentro de ese tono sombrío y decadente, brutal en ocasiones, que tan bien le sienta a la historia. Creo que uno de los grandes aciertos de Ishida es como logra mantener el ritmo en todo momento para mantener en tensión y hacer avanzar la trama. Este volúmen en concreto toca muy bien el tema de los diferentes tipos de ghoul, introduciendo nuevas características acerca de su alimentación y su organización o jerarquía (especialmente en cuanto a como se distribuyen los distritos). Todo ello está muy apoyado por el gore que de vez en cuando salpica la trama.

En cuanto al diseño y al dibujo, hay que decir que ciertamente mejora el del primer tomo, con una mejor construcción de escenas y una mayor limpieza, aunque esto último quizás sea producido por la reducción de escenas de acción. Ishida sigue gustándome mucho a la hora de reflejar el carácter o el sentir de los personajes a través del dibujo, las expresiones son sublimes. Algo similar ocurre con la construcción de escenas de pelea, con personajes muy móviles y con características únicas bien plasmadas en el trazo. No se producen peleas desconcertantes en las que no sabes que ha pasado o quien golpeó a quien (algo que si se producía en algunos momentos del primer número de la serie). Sorprende también los momentos en que los ghouls muestran su verdadera naturaleza, ya sea comiendo o en otra situación. En este sentido vuelvo a mencionar la mejora que hay en el tratamiento del gore, que queda mucho más realista y espectacular. En cuanto al diseño de personajes, la cosa también va "in crescendo", sobre todo con la introducción de Yomo, un ghoul misterioso, y Uta, fabricante de máscaras de ghoul. El diseño de Uta me ha maravillado, con un rollo punk muy marcado, lleno de tatuajes y piercings y con una gran ambigüedad tanto en diseño como en carácter. De momento cada personaje es único y muy carismático.

Por último, y antes de pasar al "territorio spoiler", hablar como siempre de la edición que ha hecho Norma. Comienzo diciendo que la sobrecubierta me parece una preciosidad, Touka es uno de mis personajes favoritos y la ilustración de portada me encanta. Con un color muy destacable y una postura complicada de dibujar y muy espectacular por el impacto que causa, es una de las portadas que más destacan en mi estantería. La ilustración de la cubierta interna también es muy bonita, y me gusta mucho que no sea como otros mangas en que la imagen interior es tan solo la imagen de portada sin el color. Por otro lado, la maquetación sigue siendo muy buena, y ha mejorado el uso de los márgenes, que en el anterior tomo a veces hacía poca justicia a algunas viñetas. De nuevo todas las páginas son en blanco y negro y, además de la historia principal, cuenta con unas cuantas viñetas de humor al final, que si bien no son la gran cosa, siempre gustan. La traducción a cargo de Marc Bernabé está a gran altura, destacando especialmente la localización de expresiones, algo en lo que el traductor siempre trabaja muchísimo y que ayuda al lector a entrar mucho más en situación. El precio, por cierto sigue siendo, y será hasta el final, de 8€.

Y ahora, antes de la opinión final, vamos a la opinión con spoilers de la que os hablé al principio (clickando en el cuadradito a continuación):

Este tomo a nivel historia creo que está muy por encima del anterior en cuanto a trama, aun siendo muy introductorio. Los dos inspectores de la CCG, Amon y Mado, son dos grandes incorporaciones, tanto por su manera de ser y actuar como por los secretos que parecen ocultar. Creo que tanto por diseño como por la organización a la que pertenecen, tienen todas las papeletas para ser también ghouls, no se si del mismo tipo que Kaneki o completos, pero el autor da pistas sobre ello a la hora de dibujar las manos, que me recuerdan mucho a las de Kaneki al perder el control, así como el hincapié que se hace en Amon comiendo. Por otro lado, me gusta mucho el contrapunto que ha puesto el autor con el drama de la historia de la señora Fueguchi y su hija Hinami, sobre todo a la hora de dar a los ghouls esa cercanía a los humanos. Me gusta como Kaneki se da cuenta, a través de lo que les pasa a las dos, de que debe olvidar sus prejuicios y empezar a ayudar a la gente que sea cercana a sí mismo, sea humano o ghoul, ya que en el fondo son muy iguales. Aun así disfruté muchísimo con la muerte de la señora Fueguchi, creo que su decapitación es uno de los grandes momentos gore del manga y está muy construida, dejando ver muy bien como son los personajes y dando espectáculo.

Luego también estoy encantado con las nuevas incorporaciones de los nuevos ghouls. Yomo me parece un personaje de corte muy clásico, con aura misteriosa pero que en el fondo es un tipo de gran corazón. Me llama la atención que aun no se le haya visto su "lado ghoul" más allá del salto al vacío que hace cuando está recogiendo cadáveres de suicidas con Kaneki, así que tengo sospechas de que podría ser humano. Por otro lado esta Uta, el dueño de la tienda de máscaras. Me ha parecido un gran personaje, ya que vale tanto para momentos dramáticos como para cómicos, y esa ambigüedad que le ha otorgado el autor da mucho juego. A nivel diseño creo que es rompedor, impactante para el lector que no se espera un ghoul así, y conectas desde el primer vistazo. Aun así no me ha quedado muy claro para que sirven las máscaras. Es decir, entiendo que son para ocultar la identidad de los ghouls pero, ¿solo cuándo están de caza? Porque ver un tipo con esas máscaras por la calle no creo que sea muy habitual. Además se ha demostrado, con el caso de los Fueguchi, que pueden comprometer y mucho la identidad del ghoul en caso de morir y ser enterrado con ella, así que veo, de momento, más riesgo en llevarla que en no hacerlo. Sin embargo la máscara de Kaneki (que obviamente ya había visto en diseños por Internet) me ha parecido brutal. Choca un poco ese aire "sadomaso" que se le queda a un chico tan pasivo como Kaneki, pero la boca con esa cremallera, el hecho de que el ojo malo quede al descubierto, la expresión que le otorga y como lo deshumaniza... Queda perfecta, y estoy deseando ver las máscaras del resto (la de Touka del conejo me pareció algo sosa, aunque le pega.)

Por último, estoy deseando leer y conocer más acerca del tema de los Kagune, las armas que sacan de su cuerpo los ghouls. Es una cosa que me recuerda muchísimo a las "Ramas del pecado" que usaban en Deadman Wonderland y espero que Ishida sepa darle la misma variedad y espectacularidad que se daba en la obra de Kataoka y Kondou. Muy original y muy acorde al tipo de peleas que se quiere desarrollar.

Este segundo volúmen de Tokyo Ghoul tiene mayor nivel que el primero. Sigue siendo muy introductorio a todos los niveles, pero introduce nuevos personajes y comienza a darle ritmo a la trama y evolución a los caracteres. El dibujo mejora y tiene escenas verdaderamente espectaculares sobre todo a nivel gore. Lo peor de que haya sido tan bueno es que ahora haya que esperar un mes entero a la salida del tercer tomo. Pero de momento, Tokyo Ghoul cumple lo que promete: acción, gore y supervivencia. Los parecidos a otras series se siguen acentuando, pero dentro de una personalidad propia. Un muy buen arranque para un muy buen manga.

R.Betta