"Two Keys", como ya habéis leído antes, es un "manga" guionizado por Aliena Shoemaker y dibujado por Chloe Chan. Entrecomillo lo de manga por que es una de las obras más complejas que he encontrado a la hora de encajarla en una demografía habitual, más que nada porque es incluso complicado definir si se trata de un manga, un manhwa (cómic coreano) o una suerte de cómic underground occidental. Ateniendo a que ha sido Milky Way la editorial que ha decidido traerla al mercado español, vamos a considerarla manga y por lo tanto se tiene que encajar, por trama y dibujo, en el bando de los seinen.
"Two Keys" comenzó a publicarse en el año 2010 en "Mangamangazine" y en la propia web de las autoras. La obra actualmente consta de dos tomos (ambos ya publicados en España), aunque ambas creadoras han confirmado que constará de 4 tomos en total. El tercer tomo parecía que podía haber llegado en otoño del pasado 2014, pero parece ser que el proceso está siendo bastante lento y aun estamos a la espera. Hablando de Aliena y Chloe, hay que decir que son dos autoras conocidas por publicar y dar a conocer sus webcómics (como el propio "Two Keys") a través de páginas como "Mangamangazine" o "Smackjeeves". Aparte de sus webcómics también han participado en varios oneshots y proyectos de doujinshi. Su obra más conocida, "Two Keys" aparte, es "Honeydew Syndrome", una obra corta que consta de tres capítulos y que mezcla la comedia y el romance entre un joven emo y su compañero deportista.
La trama de "Two Keys" está muy ligada a la influencia del cine negro, siendo quizás este el punto más determinante a la hora de tratar el manga como algo muy cercano a la novela gráfica occidental. Toda la trama, desde argumento a personajes, pasando por la construcción de situaciones, escenas o esquema narrativo está ligado a ese aire detectivesco de los años 50 que destilan las buenas obras de cine/novela negra. Centrándome exclusivamente en la trama, nos encontramos con la figura del protagonista, Colin Aston, que es el dueño del bar "Two Keys", donde trabaja con su camarera Flicka. El local está situado en el interior de la ciudad de Exodus, una urbe de corte futurista que vive la lucha interna entre humanos y "ocultos", una suerte de seres sobrenaturales (con apariencia humana o no) que poseen poderes. Aston, pese a su anodina vida actual al frente de su establecimiento, tiene un pasado de detective que llamara la atención de Audrey Price, una agente de la AIFA (la agencia de control de los ocultos) que solicita sus servicios para resolver el misterio de la desaparición de uno de los peces gordos de la agencia, Lucas Blaire. Pese a sus reticencias iniciales, Aston acepta el caso y comienza una investigación que le llevará al oscuro submundo de la ciudad de Exodus, donde se verá empujado a luchar contra las luces y las sombras de la situación actual de la ciudad... y también de su propio pasado.
Como se puede ver una trama más propia de una película o una novela gráfica occidental que contiene todos los elementos propios del mundo de la novela negra: un detective retirado en horas bajas, una misteriosa mujer que le propone el caso de su vida, una ciudad asolada por los conflictos internos, personajes arquetípicos como el clásico informante, el político corrupto... Y esto solo hablando a nivel argumental, ya que la construcción narrativa o incluso los diálogos están totalmente enfocados a venderte una suerte de "LA Confidential" mezclado con una ciudad futurista y la subtrama del mundo de los ocultos. Pese al batiburrillo que parece conformar todo esto, y más aun si tenemos en cuenta que hablamos de un manga, en mi opinión las autoras consiguen crear un ambiente perfecto para este tipo de tramas, con una construcción de personajes sencilla pero efectiva, y un ritmo narrativo que, pese a su lentitud (algo habitual en este tipo de tramas) consigue ser verosímil y hacer que el lector se enganche y quiera saber más. Esto se da sobre todo a partir del tomo 2, donde la trama avanza de manera notable y el ritmo va in crescendo, hasta el clímax final que queda abruptamente cortado, no por el gran cliffhanger que se genera, sino por la no continuidad que las autoras le han dado a la obra,
Una de las cosas que más me han gustado en este "Two Keys" ha sido la manera en la que se narra la historia. Los diálogos están perfectamente recreados y adaptados para el ritmo que necesita la trama, con multitud de acotaciones que reflejan el pensamiento del protagonista (pese a que la narración no es en primera persona) y que ayudan a construir tanto la situación que se da en el momento, como el contexto y el trasfondo. En este sentido tiene también mucha importancia el gran trabajo que hace la guionista a la hora de racionar la información que otorga al lector, ya que como toda novela negra todos los actores de la función conocen la historia previa pero la sueltan con cuentagotas para conseguir mantener el misterio. Todo ello aderezado con la también arquetípica trama política, en este caso rodeada de un aura a lo "X-Men" o "Fabúlas", con personajes en medio de una rebelión, de una guerra fría librada a través de contactos, información e intereses encontrados.
En cuanto a los personajes, como ya he dicho, se enmarcan dentro de la clásica dicotomía del género negro: todos tienen matices, ni el bueno es solo bueno, ni el malo es solo malo. En este sentido la obra tiene unos cuantos matices que se pueden apreciar y disfrutar más en una segunda relectura. Hay que destacar también la identidad que se consigue a través de la recreación de la ciudad de Exodus, con un estilo muy característico y retrofuturista que recuerda a obras como "Bioshock" o "Deus Ex". Es una ciudad que se comporta como un personaje más, muy al estilo de Gotham o ciudades típicas de novelas negras. Pero pese a la buena recreación y al contexto que aporta Exodus y sus barriadas, las autoras la han relegado a un segundo plano y el resultado es que queda un tanto desaprovechada, sobre todo a nivel de carisma que podrían explotar. Pese a ello rompo una lanza por ellas al comentar que en el tomo 2 hay un mapa de la ciudad y podría significar que se le va a dar un mayor peso en los dos tomos que faltan por completar. Algo similar ocurre con los ocultos, que pese a que están bien representados y son creíbles dentro de la historia, no gozan del desarrollo que deberían para su importancia.
Hablando ahora del dibujo, hay que reseñar que Chloe Chan consigue un estilo propio y que le sienta muy bien al género y a la trama que quiere abarcar. Más cercano en cuanto a trazo, fondos y sombras al manhwa o a lo underground, hay que decir que pese a contar de solo dos tomos, evoluciona a lo largo de la obra. Al igual que la historia, el dibujo levanta el vuelo en el segundo tomo, manteniendo lo bueno y puliendo desperfectos. En el primer tomo encontramos un dibujo abocetado, abusando de siluetas y de un trazo irregular, camuflando expresiones e insinuando acciones. El uso del sombreado en trama provoca además una sensación de bidimensionalidad algo curioso, aunque la aplicación y el resultado es bastante bueno a mi parecer. El diseño de los personajes es bueno, pese a fallos evidentes en cuanto a proporción. Los fondos, eso sí, son algo escasos, también muy boceteados, y con primacía de blancos sobre negros, algo que hubiera quedado mejor al revés, dado el contexto de la trama. El detalle también es algo escaso.
Esto cambia radicalmente en el segundo tomo, donde el contraste entre blancos y negros se corrige y se adapta al tono de la obra. Los personajes mejoran en diseño, se limpian y el trazo se vuelve más continuo, otorgando mayor detalle y expresividad y dando más fluidez a la acción. Las tramas dejan de ser abusivas y se dejan de aplicar directamente sobre personajes, mejorando el efecto y acercándose más al estilo manga. El estilo se hace más propio en este segundo tomo, incluso los fondos mejoran con algo más de detalle.
En ambos tomos se echa en falta algo más de uso del lenguaje no verbal (aunque hay algunos intentos que quedan bastante bien, sobre todo porque ocultan detalles de trama que se revelan a posteriori). Lo que más destaco, más allá del dibujo y demás, es la construcción de escenas y de planos, que dotan a la acción del aire "pulp" y cincuentero que necesita, pese al futurismo de la ciudad. Además las transiciones que se hace a veces en el inicio del capítulo (especialmente en el segundo tomo) son geniales, con un gran efectismo y acabado.
En cuanto a la edición, pese a ser de las primeras obras que editó Milky Way el cuidado y el mimo que se nota en la presentación es evidente. La edición es rústica con sobrecubierta de tapa blanda (11,5 x 17) en ambos tomos. El acabado de la sobrecubierta es excelente, tanto por la portada elegida y su color como por el tacto. En el interior las páginas son todas en blanco y negro. El precio, debido a su menor tamaño, es algo más bajo que el habitual: 6,95€. Aparte de la obra original se incluyen una serie de tiras cómicas al final de cada tomo, y por hacer pedido online, el regalo habitual con un marcapáginas y una ilustración de pequeño tamaño (un marcapáginas e ilustración por cada tomo). La maquetación sigue los estándares de calidad habituales en Milky Way, con buen respeto por márgenes y dibujos y la traducción cumple sin grandes alardes.
En conclusión, "Two Keys" es un manga atípico, con una trama más propia de un cómic independiente occidental que de una obra japonesa o coreana. Tanto el dibujo como la estructura narrativa están perfectamente adaptadas al estilo de novela negra, con reminiscencias a obras del corte de "Sin City" o "Fábulas", aunque con algo menos de calidad. La trama es algo lenta, como suele darse en este tipo de obras, pero recrea bien las situaciones. El buen diseño de personajes hace que los arquetipos a los que responden pasen desapercibidos. El dibujo, pese a que mejora en el segundo tomo, es discreto, cumplidor, en ocasiones bastante atractivo, pero deja la sensación de que puede dar más de sí. La ambientación está muy lograda pero es poco aprovechada, aunque esto puede achacarse a que aun faltan dos tomos para completar la obra. Es un manga que ha pasado bastante desapercibido por nuestro país, quizá sobre todo porque la editorial que lo ha traído y el público que suele consumir sus productos, que no suele tener interés por obras de este estilo. A mí, personalmente, es una obra que me ha gustado mucho, con una trama interesnate y original a la que solo le hace falta algo de continuidad por parte de las autoras para poder desplegar todo su potencial. Esperemos que los tomos que faltan vean la luz algún día, porque pese a no ser una obra maestra, es un manga entretenido y con identidad propia. Si os gustan las tramas detectivescas y de estilo novela negra no deberíais dejarla pasar.
Lo mejor: La trama y su estilo. La ambientación y la manera de narrar. Los personajes.
Lo peor: Queda inconclusa y los dos tomos pendientes están en el aire. Algunos elementos como los ocultos y la ciudad están desaprovechados.
Puntuación:
Historia: 7,5
Personajes: 7
Estilo Narrativo: 7,5
Dibujo: 6,75
NOTA MEDIA:7
R.Betta
En cuanto a los personajes, como ya he dicho, se enmarcan dentro de la clásica dicotomía del género negro: todos tienen matices, ni el bueno es solo bueno, ni el malo es solo malo. En este sentido la obra tiene unos cuantos matices que se pueden apreciar y disfrutar más en una segunda relectura. Hay que destacar también la identidad que se consigue a través de la recreación de la ciudad de Exodus, con un estilo muy característico y retrofuturista que recuerda a obras como "Bioshock" o "Deus Ex". Es una ciudad que se comporta como un personaje más, muy al estilo de Gotham o ciudades típicas de novelas negras. Pero pese a la buena recreación y al contexto que aporta Exodus y sus barriadas, las autoras la han relegado a un segundo plano y el resultado es que queda un tanto desaprovechada, sobre todo a nivel de carisma que podrían explotar. Pese a ello rompo una lanza por ellas al comentar que en el tomo 2 hay un mapa de la ciudad y podría significar que se le va a dar un mayor peso en los dos tomos que faltan por completar. Algo similar ocurre con los ocultos, que pese a que están bien representados y son creíbles dentro de la historia, no gozan del desarrollo que deberían para su importancia.
Hablando ahora del dibujo, hay que reseñar que Chloe Chan consigue un estilo propio y que le sienta muy bien al género y a la trama que quiere abarcar. Más cercano en cuanto a trazo, fondos y sombras al manhwa o a lo underground, hay que decir que pese a contar de solo dos tomos, evoluciona a lo largo de la obra. Al igual que la historia, el dibujo levanta el vuelo en el segundo tomo, manteniendo lo bueno y puliendo desperfectos. En el primer tomo encontramos un dibujo abocetado, abusando de siluetas y de un trazo irregular, camuflando expresiones e insinuando acciones. El uso del sombreado en trama provoca además una sensación de bidimensionalidad algo curioso, aunque la aplicación y el resultado es bastante bueno a mi parecer. El diseño de los personajes es bueno, pese a fallos evidentes en cuanto a proporción. Los fondos, eso sí, son algo escasos, también muy boceteados, y con primacía de blancos sobre negros, algo que hubiera quedado mejor al revés, dado el contexto de la trama. El detalle también es algo escaso.
Esto cambia radicalmente en el segundo tomo, donde el contraste entre blancos y negros se corrige y se adapta al tono de la obra. Los personajes mejoran en diseño, se limpian y el trazo se vuelve más continuo, otorgando mayor detalle y expresividad y dando más fluidez a la acción. Las tramas dejan de ser abusivas y se dejan de aplicar directamente sobre personajes, mejorando el efecto y acercándose más al estilo manga. El estilo se hace más propio en este segundo tomo, incluso los fondos mejoran con algo más de detalle.
En ambos tomos se echa en falta algo más de uso del lenguaje no verbal (aunque hay algunos intentos que quedan bastante bien, sobre todo porque ocultan detalles de trama que se revelan a posteriori). Lo que más destaco, más allá del dibujo y demás, es la construcción de escenas y de planos, que dotan a la acción del aire "pulp" y cincuentero que necesita, pese al futurismo de la ciudad. Además las transiciones que se hace a veces en el inicio del capítulo (especialmente en el segundo tomo) son geniales, con un gran efectismo y acabado.
En conclusión, "Two Keys" es un manga atípico, con una trama más propia de un cómic independiente occidental que de una obra japonesa o coreana. Tanto el dibujo como la estructura narrativa están perfectamente adaptadas al estilo de novela negra, con reminiscencias a obras del corte de "Sin City" o "Fábulas", aunque con algo menos de calidad. La trama es algo lenta, como suele darse en este tipo de obras, pero recrea bien las situaciones. El buen diseño de personajes hace que los arquetipos a los que responden pasen desapercibidos. El dibujo, pese a que mejora en el segundo tomo, es discreto, cumplidor, en ocasiones bastante atractivo, pero deja la sensación de que puede dar más de sí. La ambientación está muy lograda pero es poco aprovechada, aunque esto puede achacarse a que aun faltan dos tomos para completar la obra. Es un manga que ha pasado bastante desapercibido por nuestro país, quizá sobre todo porque la editorial que lo ha traído y el público que suele consumir sus productos, que no suele tener interés por obras de este estilo. A mí, personalmente, es una obra que me ha gustado mucho, con una trama interesnate y original a la que solo le hace falta algo de continuidad por parte de las autoras para poder desplegar todo su potencial. Esperemos que los tomos que faltan vean la luz algún día, porque pese a no ser una obra maestra, es un manga entretenido y con identidad propia. Si os gustan las tramas detectivescas y de estilo novela negra no deberíais dejarla pasar.
Lo mejor: La trama y su estilo. La ambientación y la manera de narrar. Los personajes.
Lo peor: Queda inconclusa y los dos tomos pendientes están en el aire. Algunos elementos como los ocultos y la ciudad están desaprovechados.
Puntuación:
Historia: 7,5
Personajes: 7
Estilo Narrativo: 7,5
Dibujo: 6,75
NOTA MEDIA:7
R.Betta
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